Pan de khorasan ecológico: Un trigo antiguo, saludable y de proximidad

La harina de khorasan se ha convertido en una opción cada vez más apreciada por panaderos y consumidores que buscan sabor, digestibilidad y autenticidad. En Farinera La Segarra lo molemos en piedra y en formato ecológico, para preservar al máximo las propiedades de este trigo antiguo. Pero… ¿qué hace especial al khorasan? Te lo explicamos :)

Un trigo antiguo con historia

El khorasan es un trigo muy antiguo, considerado una variedad primitiva del trigo duro. Su grano es muy característico: más largo, más grande y de un color ligeramente dorado.

Popularmente se le conoce como “trigo egipcio”, porque durante muchos años se pensó que procedía del antiguo Egipto. Aunque su origen exacto no está del todo claro, sí se sabe que se cultivaba hace miles de años en el suroeste de Asia, especialmente en la región histórica de Khorasan (actual Irán y zonas cercanas).

Este carácter ancestral lo hace especialmente atractivo para quienes buscan cereales menos manipulados genéticamente y más fieles a su origen natural.

Curiosidades que lo hacen único

• El grano de khorasan puede ser hasta un 30% más grande que el del trigo común.

• Tiene un sabor característico, ligeramente dulce y con notas a frutos secos.

• Es muy apreciado en la panadería artesana porque aporta miga dorada y un aroma intenso y natural.

• El pan elaborado con harina de khorasan es más ligero y digerible.

Una de las razones por las que el khorasan ha ganado tanta popularidad es su valor nutricional:

• Contiene más proteína que la mayoría de trigos modernos.

• Es rico en minerales como el selenio, zinc y magnesio.

• Tiene un contenido notable de antioxidantes naturales.

• Aporta energía sostenida gracias a sus hidratos de carbono de absorción lenta.

¿El resultado? Una harina que combina sabor, textura y beneficios nutricionales, perfecta tanto para panes de larga fermentación como para masas más sencillas.

Proximidad + Molturación a la piedra + Eco = Calidad

Nuestro khorasan proviene de campos cercanos, cultivado por agricultores con quienes compartimos la misma visión de calidad y respeto por el territorio. Esta proximidad nos permite garantizar una trazabilidad completa, fomentar la agricultura local y reducir la huella ambiental.

Cuando trabajamos con variedades especiales nos gusta extraer la máxima calidad del grano. Por eso, este cereal entra en el molino de piedra, conservando todas sus propiedades nutricionales.

Además, nuestra harina de khorasan es ecológica, lo que asegura la ausencia de pesticidas y productos químicos, se cultiva en suelos más vivos y respetados, y se trata de un cultivo más sostenible.

Combinando estos tres elementos clave —proximidad, molino de piedra y ecología— obtenemos una harina más natural, saludable y tradicional.

El pan de khorasan

Al elaborar pan de khorasan obtenemos panes de sabor intenso, miga dorada y aromática, corteza fina y crujiente; ideales para masas de larga fermentación, panadería artesana y creativa. En definitiva, un pan de alta calidad en todos los sentidos.

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